LA PAYADA DE LA SEMANA

 El payador recién llegado de viaje tuvo que ponerse a trabajar a full por que empieza un nuevo programa de radio y no tenía nada hecho… Pero, una noche se tomó un descanso…. Y…

 

¡Que quilombo, lo parió!

fin de semana jodido…

El payador aturdido

en su rancho se quedó.

A la compu se prendió

y decidió navegar

iba a volver a chatear

después de largo parate.

Entró al canal del dislate

y puso su Nick estelar…

 

Lo entraron a saludar

casi todas las mujeres

con muchas tuvo “quereres”

de otras “pudo” escapar…

¡Ahora iba a atacar!

extrañaba ese levante

estaba de buen talante

y dispuesto a ir por más…

No se rendía jamás

siempre iba pa’ delante.

 

De pronto apareció,

una nena especial,

se sintió tal para cual

cuando apenas la leyó.

La beba le respondió

con humor a su mensaje

muy pronto llegó el pasaje

y al Messenger fue a parar.

Estaba por comenzar

interesante rodaje.

 

Por cierto lo sorprendió

su profunda inteligencia

con la mezcla de “indecencia”

que muy pronto le mostró.

Es que un juego provocó

entre sexi y literario...

De verdad, extraordinario

le gustaba al payador

empezó a sentir calor

era su instinto primario.

 

La verdad, estaba buena

la muchacha que chateaba…

El payador la miraba

y se le hinchaba la vena,

y la charla, más que amena,

estaba ya muy caliente,

y la bebota, evidente

Quería jugar un poco...

El cantor se puso loco

diría, casi inconsciente.

 

La bebota avanzó

y le propuso su juego…

no hizo falta ni un ruego,

el payador aceptó…

La camisa se quitó,

y después los pantalones…

y así, sin los “leones”

se paró y se hizo ver…

Sabía que en la mujer

brotarían emociones

 

Eso fue lo que pasó

la nena escribió ¡Mi Dios!

¡Nunca nadie como vos

esto en mí provocó…!

Su ropita se quitó

y provocante le dijo…

¡No digo tener un hijo…

pero jugar sería bueno…!

Mientras mostraba su seno

con marcado regocijo…

 

“Y quizás, -dijo el cantor-

si no vivimos muy lejos…

antes de volvernos viejos

concretemos nuestro amor…”

La beba, con gran candor,

le  preguntó  ¿Dónde estás?

por que si vos me invitás…

Es capaz que me haga el viaje…

¡Ligerita de equipaje,

Porque acá nada usarás!

 

La bebota respondió

tirándole un besito…

el cantor con un gestito

hizo que se lo comió…

La pregunta respondió

parándose en la silla…

Beba, yo vivo en “La villa”

que Carlos Gesell fundó…

Cuando puedas, invito yo…

vivirás de maravilla…

 

“La verdad, me conmociona

su presencia arrolladora

es usted encantadora

aunque creo que gritona…

Va mi canto bella Donna

para aumentar su locura.

más no tema, tiene cura

si se larga pa' la villa

Mi terapia es muy sencilla

y verá cuanto le dura.

 

Y la promesa quedó,

el viaje ya está previsto

y el payador más que listo

hasta el bulín repintó.

Nuevas sábanas compró

y cambió los acolchados

ligero pa´los mandados

cambió sahumerios y velas...

es que sigue las escuelas

de amantes destacados.

 

Veremos qué pasará

te lo cuento en la semana

si no fallezco en la cama

la payada seguirá.

La bebota partirá

y no volverá jamás

es que tiene por atrás

una pareja estable...

pero será inolvidable

porque de trampa es... lo más.

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