La vida continúa
POEMAS SIN
DUEÑA
Imposibles
Nunca he logrado con eficacia
huir de mí mismo.
Hago ineficaces intentos
por rescatar los restos de mi vida.
Pero en siguen en tus manos.
Nada
Nada es si no estás,
nada en la nada
mi nada perdida naufraga
si no estás.
La ola nada sobre nada
sin vos, solo, la ola nada.
Sueño
¿Remordimientos yo?
Qué va.
Si para dormir exhausto
cuento mis pecados cotidianos
en vez de ovejas negras.
Con el roce de tus labios,
con mis ganas de vivir me atraganto,
con el perfume de tu sexo
entre mis recuerdos y tu olvido,
entre tus muslos y los míos,
entre mi edad madura
y tus ojos jóvenes
voy al sueño.
Raro
Esa boca guarda restos de mí.
Nuestras vidas, como braguetas:
Se abren, se cierran,
En busca de amor.
Te devoro, te abrazo, te vacío.
Un espejo empañado.
Cubro mis pies: sin entender
qué es el frío.
Carajo
Noche fría.
Da paso al amanecer...
Agua turbia.
Cierro mis ojos.
Recuerdo mis viajeros;
Descubro sus gestos.
Escucho sus cantos:
Bailando, peleo.
Gotea sangre.
Heridas viejas:
Tocan mi cuerpo.
Lloro en sus vidas
Sino
Mi corazón amante
es cadencia arrítmica en
mi pecho descarnado que
mata y muere;
Crece y se marchita.
Dolor
Me duele que hayas vuelto.
De repente he sabido que yo estaba
más solo todavía.
Me faltaba saber que me faltaba
tu sola compañía.
Me duele que hayas vuelto.
Dos sendas solitarias que se juntan
en la unión del río y el mar
doblan su soledad.
Y yo ahora siento
la doble soledad de estar contigo.
Búsqueda
...¡Por Dios no me interrumpa
que estoy serenamente
mirándome el ombligo.
Con más exactitud:
Estoy haciendo un Máster
sobre la soledad.
Ando a la busca
de un frenético gimnasio
en donde endurecer,
aún más si cabe,
la recóndita
enredadera del cerebro.
Poesía
Vengan a ver mi poesía
no está hecha de material ligero
aguantará perfectamente el invierno
y en verano refrescará las mentes y los cuerpos
Hay poderosas vigas entre cada verso
hay columnas apuntalando mis palabras
Y si la lluvia desea entrar
pondré mis sueños en el techo
y taparé las goteras con mi propio dolor
Infancia
Te amo, infancia, te amo
porque aún me guardas un pueblo con amigos
una tarde con cielo de barriletes
y el olor incomparable de la tierra.
Palabras
La historia
se confunde
en la medida
en que intentamos
explicarla;
añadir variantes
y resultar ilesos. |