TIEMPOS MODERNOS

Tiempos modernos es un largometraje de 1936 dirigido, escrito y protagonizado por Charles Chaplin. La película constituye un retrato de las condiciones desesperadas de empleo que la clase obrera tuvo que soportar en la época de la Gran Depresión, condiciones promovidas, en la visión dada por la película, por la eficiencia de la industrialización y la producción en cadena. La película muestra escenas de corte futurista de la factoría en la que trabaja Charlot que podrían haber sido influenciadas por el film Metrópolis de Fritz Lang.

En esta parte del tiempo que nos toca vivir, se ha desencadenado una importante crisis económica, que si bien, en las grandes potencias parece ser coyuntural, sus efectos serán más difíciles de superar en los países emergentes.

Pintando nuestra aldea, y si afán de ser universales, podemos asegurar que la falta de empleo, una de las consecuencias más terribles de la crisis se agudiza respecto a años anteriores. No descubrimos nada si decimos que en Villa Gesell, los inviernos son “complicados”. Habitualmente, desde las distintas administraciones municipales se tomaba la decisión de administrar la crisis, de ser existencialistas y dejar a los marginales cada vez más marginados.

Gobernar hoy

No es nueva la posición que sostiene este medio desde sus editoriales Los nuevos gobernantes ya no deben dedicarse a administrar, a gestionar... Deben ser generadores de fuentes de trabajo. Necesariamente tienen que generar riquezas para su comunidad.

En los gobiernos municipales no existen muchas alternativas. Y en el Distrito de Villa Gesell menos aún, ya que desde su creación, como Municipio Urbano, tiene serias limitaciones legales respecto a la instalación de industrias. Por eso, la Obra Pública y las inversiones privadas, pasan a ser doblemente significativas: Dota a los habitantes de la infraestructura necesaria y es generadora de fuentes de trabajo, lo que es lo mismo que decir... genera riquezas. Las inversiones resultan fundamentales como generadoras de empleo”. Está demostrado que por cada persona que trabaja directamente en el sector de la construcción, hay siete que trabajan de manera indirecta. Por eso, es fundamental apoyar el desarrollo de las inversiones para que no baje el nivel de empleo en el Partido de Villa Gesell.

Los analistas económicos dirán que lo propuesto por Rodríguez Erneta en su gestión y que seguirá Gustavo Barrera, es un programa keynesiano. En 1935, cuando aún perduraba la catastrófica recesión que padecía el mundo capitalista desde 1929, el economista inglés John Maynard Keynes publicó el libro revolucionario que había madurado durante esos años sombríos: “La teoría general del empleo, el interés y el dinero”.

Keynes distinguió dos situaciones en el seno del capitalismo. En las situaciones normales, el libre juego de la oferta y la demanda asegura el pleno empleo. En las situaciones anormales cae la demanda y, con ella, el empleo. La salida para estas situaciones es que el Estado reactive la demanda y el empleo mediante la expansión de la obra pública aunque sea a costa de un déficit presupuestario. Pasada la recesión, el Estado vuelve a su posición "normal", restablece la disciplina presupuestaria y le cede el paso a la inversión privada.

La aplicación del modelo keynesiano (Obras=empleos), generará en Villa Gesell alrededor de 1200 nuevos puestos de trabajo durante cinco/seis años. Y esto, será un detonador de la economía local y regional, por los efectos multiplicadores que en forma directa e indirecta genera la construcción. Además, en un Distrito Turístico, como es Villa Gesell, la mejora de la infraestructura, generará, inevitablemente, un crecimiento exponencial de la demanda turística. Y el dinero que proviene “de afuera” es doblemente  válido. Para la economía local, cada visitante solo deja aquí sus excedentes. Es dinero que llega como si en el comercio exterior, generaran divisas importantes la prestación de servicios. Es realmente, una situación de privilegio.